Los diamantes son los mejores amigos de una chica. ¿Cómo deberÃamos llamar a una piedra rompecorazones? ¿su peor pesadilla? Bueno, esta piedra se las arregló para arruinar la vida de sus dueños durante unos 300 años. La Peregrina fue la piedra más grande que se hubiera hallado. Originalmente pesaba unos 56 quilates, alrededor de 11 gramos. También tiene una forma perfecta de una Pera pero tal vez serÃa mejor si esta hermosa piedra jamás hubiera sido descubierta. Antes de que conozcas todos los matrimonios que destruyó, regresemos en el tiempo y vayamos a los comienzos de esta piedra maldita.
Según cuentan, un esclavo encontró la Peregrina en Panamá en los comienzos del siglo XVI, pero en vez de quedársela y ser un hombre rico se la entregó a las autoridades para que le den la libertad, y es lo que hicieron. Como Panamá era una colonia española, la Peregrina fue entregada al principe Felipe II de España. Más tarde se convertirÃa en rey y se casarÃa con MarÃa I de Inglaterra. El rey Felipe le ofreció la Peregrina a su esposa como regalo de bodas pero la piedra hizo lo suyo.
MarÃa y Felipe nunca se divorciaron, pero se sabe que el rey Felipe la abandonó. Poco después de que se casaron nunca regresó, ni siquiera cuando MarÃa se enfermó gravemente. Para ser justos, hay más de una razón para que Felipe la abandonara, bueno, sin contar que en la pintura se veÃa mas atractiva que cuando la vio por primera vez. Si bien la reina se habÃa enamorado perdidamente de Felipe cuando vio el retrato, el sentimiento no era mutuo. Ella estaba loca por él, pero el sólo aceptó casarse con ella porque el matrimonio era obligado. Después que tuvo su tÃtulo como rey de España e Inglaterra básicamente terminó su labor matrimonial. Hay otro detalle que es que MarÃa se deshacÃa del que no le caÃa bien. Tal vez es por eso que se fue, o tal vez es por la apariencia no tan tentadora de MarÃa. Tambien considerando todas las vÃctimas que subrirÃan al largo del tiempo tal vez fue obra de la Peregrina. MarÃa apreciaba el regalo y lo usaba todo el tiempo y con la piedra mandó que se haga un collar, pero una vez que murió en 1558 le dio la perla a Felipe.
Lo que sigue parece sacado de una telenovela, pero el rey Felipe intentó regalarle a la media hermana y sucesora de MarÃa, Isabel I, como una forma de ofrecerle matrimonio pero si has leÃdo algo sobre la buena reina tal vez sepas que lo rechazó de inmediato, como a todos los hombres que le habÃan pedido matrimonio. Asà que Felipe conservó la hermosa piedra y quedó bajo custodia de la corona española por 250 años. Se casó dos veces más, lo que sólo sirve para comprobar la mala suerte que le dio en su vida romántica.
Avancemos en el tiempo hasta su nieto Felipe IV, que le regaló la Peregrina a su segunda esposa Mariana, una que murió en 1696. Se supo poco de la Peregrina durante un siglo hasta que apareció en la histora con José Bonaparte. Probablementa conozcas ese apellido famoso. Bueno, despues de que Napoleón Bonaparte se declaró emperador de Francia, nombró a su hermano mayor rey de España, lo que significaba que su esposa Julia Clari serÃa la reina. Fue la segunda dama afortunada en recibir esta perla como regalo de su esposo, pero tampoco duró mucho después que le regaló la Peregrina. Julia preferia vivir con su familia en el castillo y no con su esposo, lo que hizo que ganara el apodo de La Reina Ausente. Igual que MarÃa y Felipe, la maldición no los afectó hasta el punto del divorcio pero vivieron practicamente separados. En su testamento Jose agregó que le darÃan la Peregrina a su sobrino León III, y es cuando la piedra tuvo su famosÃsimo nombre la Peregrina. Yo creo que serÃa mejor si la hubieran llamado la Viajera, por que ha pasado por tantos dueños.
Bueno, sigamos con la historia. Para sorpresa de nadie el matrimonio de Napoleón con su esposa Eugenia de Montijo tampoco fue feliz. Después de Napoleón fue vendida a un duque inglés, James Hamiton. En 1848 compró la perla para su esposa Luisa y el amor que ellos se tenian era tan fuerte que tuvieron un matrimonio feliz. Acaso la Peregrina estuviera planeando otras maldades. Luisa casi perdió la piedra 2 veces. Una vez en el sofá, y otra en un baile, pero no era por descuido de la duquesa; es que era tan pesada que se le caÃa del collar. Su hijo mayor heredó la piedra y mandó a que la perforaran para que su esposa pudiera usarla sin problemas. Después fue vendida por el cuarto duque a una joyerÃa en 1969. La joya se subastó y el ganador fue Richard Burton por una cantidad increible de 7.000 dólares. Él se la entregó a su esposa como regalo de San ValentÃn. Estoy segurÃsima que conoces a su esposa Elizabet Taylor. Además de sus apariciones en la tele y en el cine también es conocida por su reputación, de la más desafortunada en el mundo del amor. Tuvo 4 esposos antes de quedarse con Burton en 1964, y cuando Richard le regaló la Peregrina condenó su matrimonio. Bueno, el caso es que el no fue el primero y no serÃa el último, y como si Taylor no hubiera tenido ya demasiada mala suerte, la noche que recibió la maldita piedra la perdió. Taylor buscó en todos lados pero no encontró la perla, y cuando estaba a punto de rendirse vio que uno de sus perros masticaba la Peregrina, y cuando escupió la perla el destino de Taylor estaba sellado. Bueno, tampoco hay pruebas que indican que la Peregrina es la culpable de todos estos corazones rotos pero tampoco hay pruebas de que no sea asÃ. De hecho Elizabeth y Burton se casaron y divorciaron 2 veces. Después del segundo divorcio conservó el collar, y lo rediseñó con diamantes y rubÃes.
Al final la piedra fue por continentes, por dueños. Probablemente te preguntes dónde está. Hoy fue vendida.
Bueno, esta es la historia, y hasta la próxima.